No sé como va esta afirmación en la vida de las personas, pero en la mía aún es bastante difícil.
En la revista XL Semanal de Abc, Rafa Nadal, el número uno del tenis, unos de los mejores de todos los tiempo dice lo siguiente: "Si veo que estoy equivocado, cambio. Es importante saber donde están los errores para poder corregirlos o también saber que algo no va para mejorar, así que creo que no soy testarudo. Está claro que hay que hay que tener mucha constancia y espíritu de superación."
Ésta manera de pensar hace diferente a muchas personas, cambiar para mejor constantemente y tener un espíritu de superación, pero muchas veces estamos tan ocupados sobreviviendo a todo tipo de situaciones, que no podemos parar, respirar y buscar un método para vivir mejor, un cambio que nos proporcione un estado de paz, sosiego para planear estrategias más productivas en nuestras vidas cotidianas. Muchas veces esto de planificar suena demasiado a administración de empresas, lo consideramos tan grande y sencillamente lo descartamos.
Quizá en el mundo hayan personas que ya nacen con la estampa del éxito tatuado en la frente, pero en el caso de Nadal por ejemplo, es un caso de superación personal, una figura que se impone gracias a sus propios esfuerzos, pienso que para todos los que somos normalitos es un gran ejemplo a imitar, un modelo con cuyo seguimiento no perderíamos nada y tendríamos la posibilidad de ganar, ganar una mejoría con los cambios.
Unas de las mejores opciones para mejorar es analizar en dónde están los fallos, a nivel personal, sentimental, familiar, individual, empresarial, luego, una vez ubicados los yerros, buscar, planear una manera de arreglarlos, luego ser constante y finalmente, no contentarse, siempre hay que seguir evolucionando, lo que sería el espíritu de superación.
Espero con el tiempo, poder ver donde me equivoca, y afirmar también que cuándo me equivoco, cambio.